Flores Vasquez, IrmaTecuapetla Palafox, Ramon Xicotencatl2024-11-132024-11-132006https://hdl.handle.net/20.500.12371/22149"El Estado Mexicano que nació de la revolución de 1910-1917, reivindicó como objetivo garantizar el pleno empleo, sin que esto se concretara, pues existió siempre un ejército de desocupados. La fuerte emigración del campo hacia los centros urbanos desde 1946 con la industrialización del país y la reestructuración de la producción agropecuaria que se orientó a la producción de cultivos forrajeros y de exportación, incrementó la demanda de empleo y el número de desocupados; los empresarios utilizaron esta situación tornando más precarias las condiciones de vida, de los trabajadores que aún conservaban su empleo. Actualmente, la población reciente una doble agresión, por un lado, una política económica que niega a la mayoría el derecho al empleo y lo condena a obtener ingresos cada vez más precarios, aumentando el número de pobres e indigentes; y por otro, el abandono de la política social. Desde la década de los ochentas, momento en que inicia la aplicación del modelo neoliberal, está en marcha la privatización del sistema educativo, de la salud pública, de los fondos de retiro, de las jubilaciones y pensiones y de los fondos de vivienda. Los recursos presupuestales de los últimos años, se han destinado en su mayor parte al pago de la duda pública interna y externa; a los rescates financieros y a brindar las mejores condiciones al capital para el incremento de la ganancias y la sobreexplotación de los trabajadores; así como para el desarrollo de programas asistencialistas que llevan una doble intención: contener la inconformidad de las zonas de mayor marginalidad y generar condiciones para privatizar y destruir los sistemas de seguridad social. El gobierno, los patrones, los legisladores y los dirigentes sindicales charros, dicen que no hay otra alternativa más que la privatización, en el caso de la seguridad social, de nuestros fondos pensionarios, de la salud y de la vivienda principalmente. Ahora de manera impúdica reforman nuevamente la Ley del Seguro Social para afectar a nuestro Régimen de Jubilaciones y Pensiones, con la que EN REALIDAD afectan a TODOS LOS TRABAJADORES, no solo a los del IMSS, porque la Ley del Seguro Social se aplica a TODOS los trabajadores afiliados a esta institución. Todas las acciones del actual gobierno y de los dos sexenios anteriores van encaminadas a privatizar al IMSS, y si lo consiguen a través de la nueva reforma a la Ley del IMSS, cada trabajador deberá contar con un seguro médico individual que estará en función de sus aportaciones, que será un SEGURO MEDICO MINIMO a semejanza del SEGURO POPULAR, que no incluiría los servicios de especialidad ni de cirugía mayor, por lo que todos estos servicios deberá pagarse, siendo que actualmente no tienen costo para la clase trabajadora afiliada al IMSS. Para finalizar hay que recordar lo que sucedió con el sistema de pensiones al lesionar los derechos de los pensionados y demás trabajadores cambiando el sistema por el de Afores que simplemente es una forma de violación de los de derechos laborales de los trabajadores sin que se pueda aún remediar."spaAfores de violación flagrante de los derechos laborales del trabajadorTesis de licenciaturarestrictedAccessD2006 T4A3