Pérez Padilla, Miguel AngelTejeda Huerta, Antonio2025-11-252025-11-252000https://hdl.handle.net/20.500.12371/30586El análisis expone la importancia de la topografía desde sus primeras aplicaciones en obras civiles, militares y religiosas que marcaron la historia de la humanidad. Con el paso del tiempo, el papel del ingeniero topógrafo ha sido relegado, llegando a considerarse como un simple técnico en la construcción, cuando en realidad se trata de un profesional que integra conocimientos de ciencias exactas como las matemáticas y la física. Su campo de acción está claramente definido en la infraestructura de las obras, lo que demuestra su relevancia en el desarrollo de la sociedad. En todas las disciplinas profesionales actuales existen antecedentes históricos que muestran cómo evolucionaron a lo largo del tiempo; la medicina, por ejemplo, se fortaleció mediante la práctica y el establecimiento de leyes que dieron origen a una metodología. En el caso de la topografía, resulta evidente la falta de registros históricos que documenten su evolución y su aplicación en épocas remotas. La información disponible sobre este proceso es limitada, lo que dificulta reconocer la trayectoria de esta disciplina. Aun así, se reconoce que la topografía ha acompañado al hombre en la construcción de su entorno, aportando bases técnicas y científicas esenciales. La reflexión busca resaltar el valor de esta profesión, recuperar su lugar en el ámbito académico y laboral, y mostrar que su práctica trasciende lo meramente técnico al constituirse como un pilar en el desarrollo de la infraestructura moderna.spaHistoria de la ingeniería—Evolución de la topografía—Obras civiles—Obras militares—Construcción religiosa—Técnicas antiguas—Desarrollo histórico.Topografía—Fundamentos científicos y profesionales—Matemáticas—Física—Técnicas de medición—Profesionalización—Rol del topógrafo.Ingeniería civil—Obras modernas—Función estructural.Tesis de licenciaturarestrictedAccessIT00 T45