López Monroy, Rebeca YolandaCervantes Carmona, JosefinaOrduña Alor, Gisela Guadalupe2025-10-162025-10-162010https://hdl.handle.net/20.500.12371/29844La aplicación de un pasivado mejorado puede disminuir la formación de incrustaciones en calderas, optimizar su rendimiento y reducir la corrosión, prolongando así su vida útil. La corrosión representa uno de los principales problemas para los metales, ocasionando en calderas y tuberías altos costos de mantenimiento, pérdida de propiedades, riesgos de seguridad, interrupciones en el servicio y deterioro estético. Si no se controla, el daño puede hacer más rentable reemplazar el equipo que repararlo. Datos del Instituto de Estudio de Scotland revelan que entre 1899 y 1933 se perdió el 40% del hierro producido por corrosión. En México, el avance industrial requiere grandes volúmenes de hierro para infraestructura y maquinaria, cuya obtención implica altos costos desde su extracción hasta su procesamiento. Este metal, difícil de encontrar en estado libre, tiende a regresar a su forma combinada, lo que provoca la pérdida de sus propiedades metálicas y limita su capacidad para cumplir las funciones para las que fue fabricado.spaTecnología química—Procesos de oxidación—Prevención de corrosión—Calderas industriales—Incrustaciones—Mantenimiento preventivo—Protección superficial de metales.Ingeniería química—Hierro—Procesos de pasivación—Degradación estructural—Conservación de materiales industriales—Durabilidad del acero.Eficiencia energética—Optimización de sistemas térmicos—Optimización de equipos industriales—Vida útil de equipos.Optimización del pasivado aplicado en la tuberia de una caldera para minimizar la corrosión.Tesis de licenciaturarestrictedAccessIQ2009 C4 O6