Fernández de León, Diego, fl. 1682-1710 (impresor)Victoria Salazar, Diego de2021-08-032021-08-031690https://hdl.handle.net/20.500.12371/13743Santo Domingo de Guzmán (1170-1221), fundador de la Orden de Predicadores, fue uno de los principales propulsores del rezo del Rosario, el cual se realizaba en el contexto de la cruzada contra los albigenses. De ahí, el rezo fue haciéndose popular y conocido en Europa, sobre todo a partir de 1570, cuando el papa san Pío V instituyó litúrgicamente la memoria de la Virgen del Rosario el 7 de octubre a raíz del triunfo de los ejércitos cristianos sobre la armada turca en la Batalla de Lepanto, considerándose que su rezo había propiciado la victoria y frenado la expansión del Imperio otomano. Por todo lo anterior, así como la veneración que los dominicos han profesado por la Virgen María en dicha advocación, en 1650 se inició la construcción de la capilla que estaría dedicada a la Virgen del Rosario dentro del templo conventual de los dominicos en la ciudad de Puebla, concluyéndose las obras 40 años después, en 1690, y que se ha considerado como un emblema de la arquitectura barroca en América debido a su ornamentación que buscaba emular el Paraíso. Las festividades de la inauguración duraron ocho días, y los sermones que se predicaron en cada uno de ellos se compilaron en la publicación Octava maravilla del Nuevo Mundo en la gran Capilla del Rosario, dedicada y aplaudida en el Convento de Nuestro Padre Santo Domingo de la Ciudad de los Angeles, el dia 16 del mes de Abril de 1690 (Puebla : Diego Fernández de León, 1690). El presente texto forma parte de dicha obra pero, en algún momento, fue publicado por separado con algunas diferencias con respecto a su variante compilada.El predicador comienza su sermón con el pasaje bíblico alusivo a Zaqueo (Lc 19,1-10) y de cómo este lo recibió en su casa. Dicha acción, comenta el autor, tiene su eco cada que se inaugura o dedica un templo o capilla como en el momento en el que se pronuncia este sermón. Se asegura, haciendo el paralelismo entre el Jericó (de donde venía Jesús) que había sido destruido por los israelitas en tiempos de Josué, con el mundo actual lleno de peligros espirituales, y que Jesús mismo ha buscado restaurar mediante el Rosario. De ahí sigue todo un ejemplo de ornamentación retórica que va desde la comparación entre los peces que San Pedro sacó en sus redes (Lc 5) con el número de Avemarías que conforma el Rosario, las Marías que seguían a Jesús en su ministerio hasta el día de la resurrección, si Cristo quería que se consagrase un templo especialmente para su santa Madre, etc.pdf12 hojas; formato in-quarto (20 cm)encuadernado en pergamino con cintas, la encuadernación desprendidaspaSermones ; Sermones de ocasión ; Sermones mexicanos -- S. XVIISermon que predico el Doct. D. Diego de Victoria Salazar, Canonigo Magistral de esta Sancta Iglesia Cathedral de la Puebla de los Angeles, Vicario Superintendente, y Iuez hordinario de los Conventos de Religiosas de esta Ciudad, Examinador Sinodal de su Obispado, y Calificador de el Santo Oficio, en la solemne fiesta de la dedicacion de la Capilla de Nra. Señora del Rosario, fabricada en la iglesia de Santo Domingo de esta ciudad el dia primero de su octavaOctava maravilla del Nuevo Mundo en la gran Capilla del Rosario, dedicada y aplaudida en el Convento de Nuestro Padre Santo Domingo de la Ciudad de los Angeles, el dia 16 del mes de Abril de 1690LibroopenAccessDominio Público