Las tablas, breves “diccionarios morales” en la edición de obras del XVII
Abstract
"A mediados del siglo XVI, se inició la costumbre de agregar un índice, más comúnmente llamado tabla, colocado por lo común al final del volumen impreso como guía de lectura y que constaba de unos pocos folios sin numeración. Para mediados del XVII, sin embargo, las tablas se fueron convirtiendo en abultados resúmenes de lo que contenía un libro y, en algunos casos, en lo que podría denominarse “breves diccionarios morales”, como en el volumen V de las Obras completas de Juan de Palafox y Mendoza, de 1665. Si bien muchas fueron escuetas, hubo casos de tablas narrativas, como la que aparece en una obra de Juan Bautista Poza [1647]. En Arte de predicar la palabra de Dios [1667], incluso, se ofrece una manera de hacerlas. En este artículo podrá apreciarse que existía un criterio editorial moralizante en las prensas españolas del Barroco, a la hora de seleccionar qué contenidos debían indizarse, sin dejar de ser las tablas, como hasta nuestros días, un lugar útil que facilita la búsqueda de un tema".