Proyecto para la construcción de ladero y vías interiores en planta Trinity Rail Sabinas, Coahuila.
Date
2012
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Publisher
Benemérita Uviersidad Autónoma de Puebla
Abstract
El ferrocarril en México inició como un proyecto impulsado por el deseo de modernizar y conectar al país. Aunque en un inicio las vías eran limitadas, durante el gobierno de Porfirio Díaz se dio un gran impulso a su desarrollo, pues consideraba que el transporte ferroviario era clave para la industrialización y el crecimiento económico. Con el tiempo, gran parte de la infraestructura fue controlada por empresas extranjeras, lo que generó preocupaciones sobre la soberanía nacional. Por ello, a inicios del siglo XX se creó la empresa Ferrocarriles Nacionales de México, que buscaba integrar y administrar las distintas rutas del país bajo un control central. Esta compañía jugó un papel fundamental durante varias décadas, pero hacia finales del siglo XX entró en un proceso de privatización, con el fin de mejorar la eficiencia del servicio y fomentar la inversión. Así surgieron nuevas empresas privadas que obtuvieron concesiones para operar diferentes rutas, mientras que la infraestructura siguió perteneciendo a la nación. Esta transformación marcó un cambio en la forma en que funcionaba el sistema ferroviario mexicano, pasando de un control estatal a una gestión compartida con la iniciativa privada. Con el tiempo, el ferrocarril dejó de ofrecer servicios de pasajeros y se enfocó principalmente en el transporte de carga, lo que impulsó nuevas obras y proyectos para atender las necesidades de la industria. Entre estos destaca la construcción y modernización de vías en zonas estratégicas, como la planta Trinity Rail en Coahuila, donde se ampliaron y adecuaron los patios ferroviarios para fortalecer la producción de carros de ferrocarril. De esta manera, el ferrocarril sigue siendo un elemento esencial para la economía, el comercio y la conectividad en México.