Estudio y calculo de una boveda circular prefabricada y postensada para uso individual
Date
1965
Authors
Journal Title
Journal ISSN
Volume Title
Publisher
Benemérita Universidad Autónoma de Puebla
Abstract
He escogido este tema, que hasta cierto punto es novedoso en nuestro medio ya que en Europa y particularmente en Italia se conocía hace más de treinta años, esto no quiere decir que en nuestro medio los métodos de enseñanza sean deficientes, sino que como somos un país joven y empezamos a progresar a un ritmo acelerado, los métodos de enseñanza van tomando los rumbos actuales de la ciencia y la tecnología. El hecho de que en Europa se conocían métodos de Ingeniería que hasta hace unos años no se conocían en nuestro me- dio, son consecuencia de los profesores de investigación que tienen en sus famosas Universidades, además del medio bélico en que han vivido en las dos últimas guerras mundiales, en que se obligaron a estudiar e investigar las estructuras de sus edificios, llegando a resolver el problema de total destrucción ideando las estructuras ligeras y prefabricadas. Aunque en nuestros niveles técnicos estemos muy avanza- dos, el problema más agudo que tenemos es el de las personas que laboran en el nivel sub-profesional, esto es, que aunque el profesional proyecte y resuelva con las técnicas mas novedosas, el procedimiento de construcción se estanca, ya que entre el Ingeniero,
el Arquitecto, etc., y el que esta en el siguiente escalón existe una gran laguna, cosa que no sucede en otros países, que a la vez que han resuelto el problema técnico, también han resuelto el problema sub-profesional, preparándolos con estudios también universitarios, haciendo de estas personas auxiliares de Ingenie- ro. En México no tenemos esa categoría. El vacío a que me refiero después del Ingeniero, no lo es en cierta forma, pues está complementado por ciertos colaboradores que son gente inteligente y útil, pero en gran parte son preparados tecnicamente para llevar a cabo el trabajo y desempeñarlo en forma eficaz y con responsabilidad. Me estoy refiriendo concretamente al "Maestro de Obras" y a los llamados "oficiales albañiles". De modo que hay que contar con auxiliares capacitados y responsables que deban de ir a la escuela, pero el hecho es que no existe este material humano, ya que los que asisten a la escuela escapan inmediatamente a otro nivel superior. Aunque la triste realidad es que contamos con auxiliares mal instruidos, muchos de ellos analfabetos y que se convierten de un momento a otro en auxiliares que frecuentemente hacen un papel fuera de toda proporción en relación con su preparación. De ahí debemos concluir que la obligación de formar a estas gentes recae sobre nosotros, los profesionales. Somos también los más inmediatamente surgidos de ellos. De hecho en el desarrollo de nuestros trabajos en diversos campos de la Ingeniería, no se puede prescindir del sobrestante, del cabo, maestro de obras y otros. En nuestra realidad cotidiana, en nuestro diálogo con la sociedad y el esfuerzo que estamos desarrollando para mejorar el ambiente, son ellos un instrumento indispensable. Al referirme a este problema que vivimos, no es con la intención de tratar de desviarme del fundamento de esta tesis unicamente para llenar hojas, sino considero y en este caso especial que estoy tratando técnicamente, que aunque se idee y se aprenda un tipo de estructura novedoso que resuelva problemas industriales, sino se cuenta con auxiliares capacitados, no se puede llevar a cabo, lo que podría ser el principio de una nueva era de desarrollo verdadero de la industria de la construcción y por lo tanto el engrandecimiento de México. Me voy a permitir insistir sobre la educación técnica de nuestra gente que colabora con nosotros, de un modo directo, ya que como carecemos de escuelas técnicas para nivel sub-profesional, les podríamos enseñar a los albañiles, hablándoles en términos técnicos, como elementos estructurales, vigas, losas, etc. Hay que aclarar como se fabrica el concreto y que se pretende. Hacerles ver del modo más conveniente el uso de la revolvedora y del vibrador. Insistirles en el papel de la varilla, su calidad, cantidad y correcta colocación. Hay que considerar también las deformaciones plásticas del concreto y el efec- to del curado. En fin, hay muchos detalles. Al referirme a la parte técnica de los auxiliares, considero de vital importancia hacer mención de la parte humana que debe existir entre el profesionista y sus subalternos quedan- do bien definida sus responsabilidades. Por ejemplo, el Ingenie - ro se debe parecer a sus materiales, deberá ser realmente elástico puesto que está colocado entre dos fuerzas que tratan de aca- barlo. Por un lado el propietario de la obra y por el otro, el trabajador. El Ingeniero generalmente no se puede dar el lujo de su rango plástico.