"El cáncer de seno ocurre como resultado del crecimiento anormal de células en el tejido del seno, comúnmente conocido como un tumor, los tumores pueden ser benignos (no cancerosos), o malignos (cancerosos). Las pruebas como la resonancia magnética, la mamografía, la ecografía y la biopsia se utilizan comúnmente para diagnosticar el cáncer de mama. La mayoría de los bultos en los senos son benignos, los tumores no cancerosos en los senos son crecimientos anormales, pero no se propagan fuera de ellos. Estos tumores no representan un peligro para la vida, aunque algunos tipos de bultos benignos pueden aumentar el riesgo en una mujer de padecer cáncer de seno."